jueves, 12 de enero de 2012

Crónica MAS (17). 9/1/12

La Navidad, por fin, había terminado y había ganas de volver a la festiva normalidad de todos los lunes de El Savor, porque, entre otras cosas, Micro Abierto Salamanca (MAS) sirve para entrar con calor en el frío de la rutina. A las veintidós horas, la edición número 17 de MAS aún tenía forma de interrogación, pero poco a poco los participantes se fueron “alistando” y el papel se fue convirtiendo en el prometedor guión de una noche de, sobre todo, buena música, buenos versos y buen humor.

Levantamos el telón para descubrir a los primeros artistas de la jornada. Eli y Javi no tenían intención de participar: habían ido a pedir fecha para dar un concierto en El Savor, feliz coincidencia gracias a la cual pudimos disfrutar de dos preciosas versiones: de “Boa sorte”, de Vanessa da Mata, y “No sé mañana”, de Rosana. Aún está por confirmar la fecha de este concierto (31 de enero o 1 de febrero) que, a buen seguro, será una buena oportunidad para volver a disfrutar de este magnífico dúo.

La segunda intervención fue todo un descubrimiento, y de lo más agradable. Dominique, a quien habíamos conocido en calidad de músico, se presentó con gran éxito como prosista. El francés compartió con nosotros una simpática carta que escribió a su primo Gaston en la que le relata su experiencia en Salamanca (trabajo, chicas, diferencias culturales...). Su lectura (que interrumpió para manifestar su admiración por Luis Somoza) estuvo acompañada de numerosas risas y finalizó con un estrepitoso aplauso. 

Joan Corcino
De la epístola a la poesía del puertorriqueño Joan Corcino. “Después de las risas, comienza el festival del bajón.” Así preparó al público que tanto se había reído con Dominique para adentrarse en la tristeza que arrastraban sus versos en poemas como “La pequeña verdad del humo”. Con los dos textos que recitó volvió a quedar clara la buena letra de sus composiciones.

Los Reyes Magos habrán traído carbón dulce a quien se lo merezca. A Virginia Montaño le han dejado en un enorme zapato una bonita guitarra con la que compondrá sus futuras canciones (ha prometido escribir alguna más alegre, teniendo en cuenta que el segundo tema que cantó, “Felicidad”, tuvo una buena acogida). Además, ha aprovechado las vacaciones navideñas para hacer sus deberes artísticos y ha grabado su maqueta Origami, de la que nos presentó “Cien canciones” y “Libertad para mirar la vida pasar”. Podremos conocer más de este trabajo en su concierto-presentación el  24 de enero en Café Santa Ana (aquí tenéis el enlace del evento).

Rodrigo Bocanegra nos sorprendió, especialmente a los que lo conocemos un poquito más, con su templanza en el escenario. Era la primera vez que participaba en MAS, y algo me dice que no será la última. Un amigo le aconsejó que empezara con “algo porno” para quitarse los nervios, y lo hizo con un poema de Cabrera Infante, al que siguió un relato poético de creación propia. Para terminar pidió a la que escribe esto que lo acompañara en la lectura de su poema sadomasoquista, dedicado a la vicepresidenta del Gobierno, imaginándome que le pisaba el escroto con mis imaginarios zapatos de tacón de aguja. Me lo imaginé pero, incapaz de escenificarlo, lo dejé solo con las palabras en el escenario.

La primera parte la cerró Richard. Una vez más, arriesgó en sus versiones. El reto esta vez fue “Ojalá”, de Silvio Rodríguez, una bella y complicada canción, pero con su elección consiguió que a cada uno de los presentes se le pusiera la memoria en marcha y que la música iluminara los rincones más oscuros de la nostalgia. A “Ojalá” siguió una segunda canción, “Faro de Lisboa”, de Revólver, que dedicó a su compañero el pintor Alfonso Pina.

Qué mejor que empezar la segunda mitad de MAS con la marcha y el buen rollo de David Súper. Él avisó: “Para pasarlo bien, vais a tener que cantar, babies”. Y el público demostró que, otra cosa no, ganas de pasárselo bien no le faltaban: gran coro para Súper en sus versiones de dos clásicos: “Proud Mary” y “Mustang Sally”. El escenario, los monitores, las mesas… todo tiembla cuando El Súper se sube al escenario.

Óscar Rodríguez
Óscar Rodríguez dejó su preciada cámara fotográfica, con la que retrató esta edición de MAS, para “sacar del laboratorio algunos poemas”, versos nuevos que viajan con otros ya maduros, como los de “Geografía de la violencia”, “Lleno/vacío” o “Primera reflexión” (título que ganó la partida después de que su autor se autocensurase el original). Óscar es un poeta que siempre es mejor escucharlo que leerlo: construye el poema con su voz. Pablo Madruga registró con la cámara de Óscar la comodidad con que se mostró en su "laboratorio de creación".

Aunque se había despedido como Alfredo Rubbenstein, lo cierto es que reapareció y no rectificó el nombre con que lo presenté, así que suponemos que Alfredo seguirá siendo Rubbenstein hasta que nos revele su próximo nombre artístico. Siguió su pauta habitual: primero un poco de humor (del suyo) como particular “patrocinio” de un desgarrador relato dramático para sumergirnos, de nuevo, en el lado más humano, en el más horrible, de un conflicto bélico. 

La barra se quedó sin camarero durante las dos canciones que Matías y La Justicia Divina celebró para continuar con su “lucha social en solitario”. Con el primer tema, nos describió las impresiones de un niño tras morir después de haber recibido una brutal paliza en el colegio. Con la segunda, nos invitó a coger las maletas de la imaginación y a acompañarlo bailando “a recorrer el mundo”.
 
Dominique ya había hecho notar su presencia entre el público y, muy acertadamente, al elogiarlo habló de slam…  y es que Luis Somoza es un “púgil” del verso libre y de la oratoria. Su intención, después de que la semana anterior intentase recitar a una “velocidad más moderada”, era pisar el acelerador para ofrecerse en su característico estilo, pero lo cierto es que salió al escenario más tarde de lo que le hubiera gustado, por lo que optó por leer menos texto más despacio, para que no se hiciera demasiado larga la recta final de esta edición de MAS. Nos obsequió con, aparte de su consideración, su relato Hidroplexia (muy, muy bueno: mejor escucharlo leído por Somoza), un poema y dos micropoemas (del primero anoté un verso incompleto; ahora, gracias al comentario que su autor ha hecho, podemos releerlo en su forma original:  “… no tengo pasado porque mi pasado es el pasado del universo, estoy a dos millones de años luz de ti, formo parte de muchos cielos y desde mi atalaya te veo pasar despacio, despacio, muy despacio”).

Koji Sazaki
Penúltimo de la noche, apuntado en el último momento, Koji Sazaki no pudo resistir las ganas de compartir con nosotros el texto que encontró en la hoja que se escondía entre las páginas de un libro de la biblioteca, sobre un hombre que le robó la sombra a los dioses. Intervención breve pero intensa, como suelen ser las apariciones de este amigo de MAS y gran poeta. (Petición personal: ¡Koji, vuelve a leer algo en japonés!)


Hasta aquí la noche ya había sido preciosa y grande en contenido y forma… Aún quedaba un regalo más para nuestros oídos: Cool Pack. Con sólo el cincuenta por ciento de la banda en el escenario de El Savor, disfrutamos y nos emocionamos con sus versiones deMoon River” de Desayuno con diamantes, de “Don't You Remember”, de Adele, y de una tercera en francés de la que no anoté el título. Después de escuchar estas tres canciones, yo lo tengo claro: el viernes 13 de enero iré al concierto de Cool Pack, con la banda al completo. Será en Castafiore (Crespo Rascón). 


Cool Pack

Ya sólo me quedan las suficientes palabras para darlos las gracias a todos por vuestro arte. ¡Gracias!

Os esperamos el próximo lunes con más en MAS (18).

2 comentarios:

  1. Ante todo felicitarte por tu crónica, como siempre genial, se nota que te lo curras que le pones cariño y pasión. Las leo todas y, bueno… Muy, muy agradecido de lo bien que me tratas en ellas, que te voy a decir. Tan solo un apunte de poetilla maniático; el verso que mencionas en realidad es así:
    ( ...no tengo pasado porque mi pasado es el pasado del universo, estoy a dos millones de años luz de ti, formo parte de muchos cielos y desde mi atalaya te veo pasar…)
    Una vez más mi agradecimiento por tu inestimable labor al timón del micro y por ponerle arte a los Lunes.
    nos vemos en el micro

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  2. Tomo nota del verso: no sabía si cambiarlo o dejarlo tal cual, para que quede constancia también de la velocidad -y error- con que se toman algunas notas en los MAS. Finalmente, he decidido subsanar el error.

    Gracias por los comentarios que haces; tratarte bien en las crónicas no resulta difícil, Luis. Ojalá que a lo largo de este año se cumpla tu propósito de publicar... y que nosotros lo veamos (y compremos).

    Un abrazo y hasta el lunes,
    Andrea

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